Surrey, en Inglaterra, es una región emergente en la producción de whisky, combinando tradiciones británicas con innovaciones modernas. Situada cerca de Londres, esta región se beneficia de un clima templado favorable para la maduración del whisky. El terruño de Surrey se caracteriza por sus suelos arcillosos y calcáreos, que influyen sutilmente en el perfil aromático de los whiskies producidos. A pesar de su condición de neófito en el campo del whisky, comparado con Escocia o Irlanda, Surrey ha visto la aparición de pequeñas destilerías artesanales que dejan su huella con productos de calidad superior. Estas destilerías favorecen un enfoque sostenible, utilizando ingredientes locales y métodos de producción respetuosos con el medio ambiente. Los whiskies de Surrey se describen a menudo como elegantes y complejos, con notas florales y afrutadas, una característica que atrae tanto a los conocedores como a los novatos. Al gestionar su bodega de whisky, incluir botellas procedentes de Surrey aportará una dimensión original y contemporánea a su colección, destacando una región en pleno crecimiento en el panorama mundial del whisky.